Digo que no existe porque esto ha ido tan rápido que, honestamente, todavía me cuesta llamarle negocio.
Se lo contaba el otro día a los 465 alumnos que ya están dentro de Negocios Salvajemente Libres.
Que ni yo mismo me esperaba este rotundo éxito en términos de validación del mercado.
Y tan pronto.
Luego, al final les adelanté en lo que ando trabajando.
Algo que interesará sobre todo a aquellas personas que estñan hartas de tomar solos todas las decisiones en sus negocios.
Si eres alumno y viste el directo, ya me entiendes. Y además esta tarde a las 17h te mandaré un email contándote más.
Solo si eres alumno, digo.
Bien.
A ver, ¿es difícil ganar 6.336,83 dólares limpios con un negocio online?
En absoluto, en este universo puedes generar eso y mucho más. No te lo digo de oídas.
¿Es mucho ganar 6.336,83 dólares limpios en menos de un mes, con un proyecto que hace apenas unas semanas ni existía (y ni atisbo de que fuera a existir) y un producto mínimo viable que tardaste apenas una tarde en crear, si además eres un tipo que siempre operó en otro nicho, cuya empresa cerró en diciembre del 24, y que no es influencer ni tiene audiencias masivas en RRSS infernales?
En absoluto, es algo que cualquiera puede hacer si tiene el mapa claro.
Bueno, tampoco nos pasemos.
Mis haters que todavía viven con los padres a los 40 y se pasan el día haciéndose pajas y comiendo cantidades ingentes de ganchitos mientras critican a desconocidos aporreando el teclado del móvil con los dedos llenos de grasa, esos no.
Pero cualquier persona de bien, sí.
Por eso, este email #BuildInPublic no es para mis haters.
Este email es para ti, que llevas meses (o años) dando vueltas.
Que has probado de todo pero no acabas de ver la luz.
Que tienes ideas, pero no sabes cuál elegir.
Que sabes un huevo, pero vendes menos de lo que te gustaría.
Entonces, ¿cómo lo he hecho?
No ha sido suerte.
Ni contactos.
Ni mágicos algoritmos.
Han sido cuatro cosas.
Cuatro pilares que tengo tan integrados, que me saldría tatuármelos.
Y si no los tienes tú… es probable que sigas dando vueltas como un hámster motivado.
Te los cuento:
Pilar 1: Elegir un nicho de verdad.
No un “público general con interés por el bienestar”.
Un nicho real. Específico. Con problema urgente. Con dinero.
Yo elegí hablarle a emprendedores que ya están en marcha, pero que se sienten atrapados por su propio negocio.
Gente buena que lo ha hecho todo bien… menos diseñar su libertad.
¿Y tú? ¿Podrías hablarle, por ejemplo, a fisioterapeutas quemadas que quieren vivir del conocimiento y no de las manos? ¿A diseñadores web que quieren dejar de tener jefes-clientes? ¿A madres que quieren emprender sin tener que ser influencers de crianza?
Ponte serio con esto, hazme caso.
Pilar 2: Conocer al cliente como si durmiera contigo.
Me refiero a saber lo que le duele antes de que lo diga.
Entender qué ha probado ya, qué no le funcionó, qué le frustra, qué desea de verdad.
No “mujeres que quieren empoderarse”.
No “emprendedores que buscan crecer”.
Hablo de conocer su lenguaje, sus contradicciones, sus noches sin dormir y usar eso para construir algo que le encaje como un puto guante.
Pilar 3: Tener una audiencia propia.
No vivir de los caprichos del algoritmo.
Tener una lista.
Aunque sea pequeña, pero tuya.
Por ejemplo, esta es mi casa, y aquí invito a quien quiero y extradito a quién me toca las pelotas.
¿Tú tienes casa o sigues mendigando alcance en Instagram?
Te lo digo porque esto no va de tener 100.000 seguidores. Va de tener 100 personas que abren tus emails y te compran sin hacer el pino puente.
Pilar 4: Validar antes de construir el castillo.
No diseñé un logo.
No grabé 40 vídeos.
No contraté a nadie.
Saqué un MVP rápido, probé la idea, vi que funcionaba, y ahora…
Bueno, lo que se viene ahora no lo voy a soltar aquí, todavía y solo algunos cientos de personas lo saben.
Si eres alumno de NSL ya sabes por dónde van los tiros.
En cualquier caso, ¿sabes lo que más cuesta a la gente?
Quitarse la manía de querer hacerlo todo perfecto.
Te lo digo porque la acción masiva siempre gana al perfeccionismo.
Siempre. Aquí y en China Popular.
En fin, que estos cuatro pilares me han llevado hasta aquí.
6.336,83 dólares limpios en menos de un mes con una idea que hace apenas un puñado de semanas ni siquiera estaba en mi mente.
Sin anuncios. Sin funnels de 77 pasos. Sin hacerme el gurú por Instagram.
¿Y ahora?
Ahora toca seguir.
Esto solo empieza.
Y sí, te lo seguiré contando.
Porque esto no va solo de dinero. Va de libertad. Y de contarlo como es, no como queda bonito.
Eso sí, primero se lo contaré a los que se apuntan ahí abajo, como debe ser:
Solo eres libre cuándo puedes decidir. Y aquí verás cómo hacerlo.
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