Hoy breve, que es viernes.
Breve pero incómodo, ojo.
De esos emails que no se te quitan rascando scroll.
Mira, llevo días hablando de “algo” que estoy montando.
De momento sin revelar demasiado.
Solo lo justo.
Y sé que algunos están leyendo entre líneas. Lo notan.
No es que lo sepa porque sea un erudito, ojo. Lo sé porque me escriben.
Saben que hay algo en camino.
Saben que hay algo que puede cambiarles la forma de construir.
Y cuando sabes eso…
ya no puedes pensar igual.
Porque ya no solo ves el caos en el que estás.
Ves lo que te falta.
Y eso, cuando lo ves claro por primera vez… rasca.
Y lo peor (o lo mejor, según se mire)…
es que hay personas que ya tienen algo que tú no tienes:
Dirección.
No contenido.
No motivación.
No un grupo privado.
No una idea más para la lista.
Dirección.
Alguien al otro lado que les devuelve foco.
Que les dice “mira, esto sí, esto no”.
Que les ayuda a ordenar el caos mental de “tengo 3 ideas, no sé si valen, y no quiero volver a liarme”.
Alguien que no se pone por encima, pero tampoco se queda mirando desde fuera.
Y mientras tanto, tú…
Tú estás en ese punto raro entre “sé que puedo” y “no sé por dónde tirar”.
Como cuando te dan todas las piezas…
pero sin la puta caja del puzzle.
Sabes que encajan.
Pero no sabes cómo.
Y no pasa nada, ¿eh?
Esto no es para joderte, ya me conoces.
Te lo digo para que lo tengas claro.
Porque hay dos formas de avanzar con un negocio:
- Solo. Con tus dudas, tu caos, tus cambios constantes de dirección.
- Acompañado. Con criterio, con estructura, con decisiones que no tomas a oscuras.
Y no hace falta que te diga cuál de las dos es más rápida, más tranquila, más libre…
Y desde luego, más rentable.
Por eso te escribo hoy.
No para convencerte de nada, sino para que sepas que hay un grupo de personas que ya no están solas en esto.
Y lo mejor:
Tú podrás ser una de ellas, si quieres.
Me refiero a que si estás cansado de tomar decisiones con la moneda al aire…atento.
Porque lo que viene va a devolverte el foco. Y el hambre. Y la dirección.
Sobre todo, dirección.
Y si estás listo, pronto lo vas a tener.
Por fin.
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