No lo digo por peloteo. Si no lo tuvieras, este email ni te habría interesado.
Me refiero a que tienes talento.
La cosa es…
¿Ese talento se está traduciendo en ventas?
¿En autoridad? ¿En reconocimiento?
Y en última instancia…
¿Se está traduciendo en libertad?
Porque, si hay algo que está meridianamente claro, es que tener negocio que depende demasiado de ti, es la antítesis de la libertad.
Prefiero mil veces ser vagabundo antes que esclavo de mi negocio.
Por eso necesitas algo más que talento.
Y no me vengas con “delega más”. No va de eso.
No hablo de contratar a cinco filipinos para que te lleven el Notion.
Hablo de sistema.
De algo que te permita captar sin estar todo el puto día en RRSS infernales.
De vender sin Zooms eternos con fulanos que ni sabes de dónde ha salido ni si va a pagar.
Y de entregar mientras estás en el chiringuito decidiendo si te tomas esto o aquello.
A eso me refiero exactamente con tener un sistema.
Y sí, ya sé que esto lo sabes. Otra cosa es aplicarlo.
Lo que pasa es que vas tirando, pero sin estructura.
Y ahí es donde empieza el principio del fin.
Porque si no tienes estructura, lo que tienes es un hobby caro con facturas.
Por eso esto es lo primero que te explico nada más entrar a mi lista privada.
Te apuntas ahí:
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